Acerca de este concierto
Publicado originalmente en El Ibérico. 6 de noviembre, día lluvioso -para variar- en la ciudad de Londres. El viento sopla y la gente huye de las calles para refugiarse del frío. Subiendo por Bethnal Green Road, al este del Támesis, un grupo de jóvenes se adhiere a la multitud que espera a las puertas de la sala Rich Mix, donde en unas horas están citados con la banda argentina Perotá Chingó. Aunque el inconfundible acento predomina, no es el único que se escucha en el vestíbulo del local; parece que también habrá público británico esta noche.
En la quinta planta, ‘una puerta está entreabierta’. Dentro, apenas treinta minutos antes de la hora de comienzo, Julia Ortiz y Lola Aguirre terminan de prepararse para el primer concierto de ‘Muta Tour’, gira de presentación del álbum que saldrá a la luz este viernes. El sold out lo traen desde casa y más que nervios fluye ilusión.“Es nuestra primera vez en Londres y hay mucha expectativa por saber qué va a pasar, por saber cómo es el público de acá” cuenta Lola con una sonrisa tranquila, estirada en su silla, mientras Julia se maquilla frente a un espejo. “La energía y la respuesta de la gente es siempre distinta, dependiendo del lugar” añade, y admite que cada show de Perotá es una gran experiencia con el público.
Cautivaron a tantos hace ya ocho años con la canción ‘Ríe Chinito’ en YouTube, primero, y con dos de los mejores álbumes del panorama musical latinoamericano, ‘Perotá Chingó’ (2014) y ‘Aguas’ (2017). En la actualidad y después de tres giras por Europa, Perotá no hace más que crecer y cruzar -con su música- nuevas fronteras, tanto físicas como creativas.
Del Trópico de Capricornio al Meridiano de Greenwich en cosa de una semana y media; despedirse de São Paulo no debió ser fácil. “Brasil es un país con una cultura riquísima, con mucha música, y difícilmente se fijan en lo que ocurre fuera de allí. Nos recibieron muy bien y tuvimos un público muy hermoso que nos esperó con muchas ganas”, explica Lola refiriéndose a los dos conciertos que han dado en el país sudamericano –“¡es un pico de energía!”-.
Aunque Perotá navega viento en popa, todo proyecto conlleva riesgos, más todavía cuando el origen radica en la autogestión. Por lo que cuenta el dúo, ‘Muta’ promete ser diferente a los dos primeros trabajos; una mezcla de estilos completamente distintos que se encuentran en un punto común, fruto de la producción en equipo. Lola afirma que el desarrollo del álbum ha sido un proceso muy rico que “al tener muchos elementos y cabezas pensantes, produjo un mestizaje muy interesante que no surge cuando una compone por cuenta propia”.
El binomio de electrónica y folclore parece hacerse cada vez más presente en una banda que comenzó en el marco de la música raíz y que ha ido evolucionando -‘mutando’-. Es complicado definir qué es Perotá Chingó, a qué suenan sus canciones y hacia donde fluye su estilo, que se ha alimentado del viaje como concepto. Respecto al ahora, Aguirre explica que la idea es ir intercalando lo nuevo y “lo que ya pasó” para poder ofrecer “distintos colores musicales”.
Una experiencia diferente
De cara al show, acompañando a la música también han introducido el audiovisual y la puesta en escena, para conseguir una experiencia diferente. “Es algo nuevo en lo que estamos empezando”, dice, que admite llevar mucha preparación. “Quizás por nuestro tipo de producción, se hace más duro”, explica Julia, a lo que Lola añade que “no solo cansa a nivel físico, sino también a nivel vincular y energético”.
Una llamada de teléfono irrumpe al final de la conversación: diez minutos para las 21:00h. Hora de irse; despedidas. En la planta baja, la gente se concentra alrededor del escenario y la primera fila se aferra a la barandilla que separa por un palmo la tarima. Reencuentros amistosos, sonrisas y mucha expectación en una audiencia tan multicultural como las influencias de la banda. Unos minutos de retraso y aparecen en el escenario, al tiempo que el vocerío inunda la sala; el resto es historia, su historia.
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