2024-2025
Nudibranquios en Canarias y otras babosas marinas
Vida en los charcos intermareales
La enorme biodiversidad que observamos en apenas una gota de agua de mar sirve para hacernos una idea de qué podemos encontrar en hábitats más grandes y complejos, como los charcos intermareales. Aunque efímeros, puesto que su presencia depende del fenómeno de las mareas, los charcos dan cabida a una inmensa variedad de especies marinas entre las que encontramos uno de los grupos más amplios: los heterobranquios.
Los heterobranquios o babosas de mar -antes, opistobranquios- son un grupo de moluscos gasterópodos marinos que incluyen, entre otros, a los nudibranquios. Estos animales invertebrados destacan por la variedad de formas, colores y estrategias adaptativas que presentan. Aunque se encuentran en ecosistemas marinos de todo el mundo, la diversidad de especies de nudibranquios en Canarias convierte a estas aguas en un lugar de interés para buceadores y fotógrafos especializados en fauna marina.
Además de los nudibranquios (orden Nudibranchia), cuyo nombre a menudo se utiliza erróneamente para designar a todos los heterobranquios, este grupo incluye otras babosas marinas como los sacologossos (orden Sacoglossa), los aplysiidos o liebres marinas (orden Aplysiida), los pleurobránquidos (orden Pleurobranchida) o los umbracúlidos (orden Umbraculida), por citar algunas. La mayoría de estos moluscos son organismos bentónicos, es decir, asociados al fondo marino, por lo que se distribuyen principalmente en zonas rocosas, arrecifes y praderas submarinas, a excepción de algunas especies. Estos hábitats reúnen las condiciones ideales para su desarrollo y reproducción, y contienen abundantes recursos alimenticios como algas, esponjas, briozoos, hidrozoos o puestas de huevos de otras babosas.
En el caso de las islas Canarias, los heterobranquios son especialmente frecuentes en las zonas intermareales, donde las rocas emergentes y los charcos formados por la marea baja actúan como refugios temporales. Estos entornos permiten que los invertebrados se alimenten y se reproduzcan en un ambiente relativamente seguro y con abundante biodiversidad. Además, el fácil acceso a estos hábitats favorece tanto la realización de investigaciones científicas como la práctica de la fotografía submarina, permitiendo analizar los aspectos biológicos y los comportamientos de las especies en su entorno natural.
Fotografiar nudibranquios en Canarias
Si has llegado hasta aquí, probablemente te interese saber cómo fotografiar nudibranquios o, al menos, cómo encontrarlos en su medio natural. Los nudibranquios, al igual que muchas otras babosas marinas, son una fuente de inspiración para cualquier fotógrafo submarino debido a la diversidad de colores y formas que presentan. Sin embargo, a pesar de su aspecto llamativo, muchas especies son difíciles de detectar gracias a su capacidad para mimetizarse con el entorno y, sobre todo, a su reducido tamaño (algunos heterobranquios miden menos de medio centímetro). En Canarias, algunas especies pueden llegar a medir hasta 15 centímetros, como es el caso del nudibranquio Felimare picta o de algunas liebres marinas del género Aplysia, pero no es lo habitual; la gran mayoría de heterobranquios presentes en aguas del archipiélago no supera los 2 centímetros de longitud, y muchos de ellos apenas alcanzan los 5 milímetros.
En muchos casos, la coloración de los heterobranquios está ligada a su alimentación, un fenómeno conocido como homocromía alimentaria. Por ejemplo, podemos encontrar organismos que dependiendo de si su dieta se compone de algas verdes o rojas, adoptan colores verdosos, pardos o completamente rojos. Sin embargo, una buena parte de los heterobranquios son carnívoros, como es el caso de los nudibranquios, y se nutren de esponjas, cnidarios, briozoos, puestas de huevos e incluso de otras babosas marinas. Algunas especies hasta pueden asimilar los compuestos tóxicos de sus presas y almacenarlos como mecanismo de defensa, como es el caso del nudibranquio pelágico Glaucus atlanticus, más conocido como dragón azul, que se alimenta del hidrozoo colonial Physalia physalis o carabela portuguesa. Esto les permite desarrollar estrategias de supervivencia muy efectivas contra posibles depredadores, lo que contribuye a su adaptabilidad en distintos ecosistemas marinos.
Esta liebre marina de la especie Aplysia punctata ha adquirido una coloración completamente roja al alimentarse exclusivamente de algas de ese color.
El nudibranquio Glaucus atlanticus es capaz de almacenar las células urticantes de los organismos que depreda y reutilizarlas como mecanismo de defensa. En su dieta se incluyen especies como el velero (Velella velella) o la carabela portuguesa (Physalia physalis), de la que obtiene las toxinas contenidas en unas células urticantes llamadas cnidocitos.
La tilodina (Tylodina perversa) suele permanecer oculta en la esponja Aplysina aerophoba de cuya dieta obtiene su característico color amarillo brillante. En la imagen puede apreciarse el órgano respiratorio, una branquia en forma de pluma que se encuentra bajo el caparazón.
Otra característica destacada de los heterobranquios es su sistema de reproducción. Son hermafroditas simultáneos, lo que significa que poseen órganos reproductores masculinos y femeninos. Durante el apareamiento, ambos individuos intercambian material genético y se fertilizan mutuamente con el objetivo de aumentar sus posibilidades de sobrevivir, y pueden poner grandes cantidades de huevos en estructuras espirales o filamentosas adheridas al sustrato marino, también muy interesantes de fotografiar por sus curiosas formas.
De todos las especies de nudibranquios de Canarias, la especie Felimare picta es una de las más comunes. Además, es una de las más grandes, llegando a medir hasta 15cm. Este individuo fue fotografiado en la playa de Las Canteras (Gran Canaria) sobre la esponja Aplysina aerophoba.
En cuanto al equipo fotográfico que empleo para fotografiar nudibranquios, babosas marinas y otras especies de pequeño tamaño, actualmente trabajo con la compacta Tough TG-7 de OM System. Su diseño reducido me permite acercarme mucho a los sujetos, lo que facilita el uso del flash integrado combinado con un difusor para obtener una iluminación adecuada. Al tratarse de una cámara sumergible que no requiere carcasa estanca, resulta especialmente práctica en inmersiones poco profundas, siempre que no se superen los 15 metros de profundidad. Sin embargo, para fotografiar nudibranquios y otras especies de heterobranquios ni siquiera es necesario sumergirse por completo, ya que muchos organismos se encuentran a menos de un palmo de profundidad.
Diversidad de nudibranquios en Canarias
Las islas Canarias albergan una diversidad notable de nudibranquios y otras babosas marinas, con especies que van desde las más comunes hasta algunas más difíciles de observar o incluso algunas exóticas recientemente observadas, como la sudafricana Godiva quadricolor. A continuación, se presentan algunas de las especies más representativas de nudibranquios en Canarias así como de otros heterobranquios que pueden encontrarse en estas aguas y que he podido ver o fotografiar:
Anteaeolidiella lurana | Aplysia dactylomela | Aplysia punctata |
Babakina sp. | Baptodoris cinnabarina | Bermudella mica |
Bermudella polycerelloides | Biuve fulvipunctata | Doto escatllari |
Elysia cauze | Elysia ornata | Ercolania lozanoi |
Ercolania selva | Eubranchus arci | Favorinus vitreus |
Felimare bilineata | Felimare picta | Felimida binza |
Felimida purpurea | Glaucus atlanticus | Godiva quadricolor |
Hermaea cubana | Hydatina physhis | Janolus faustoi |
Micromelo undatus | Mourgona bethencourti | Peltodoris punctifera |
Petalifera petalifera | Phidiana lynceus | Placida cremoniana |
Placida verticilata | Pleurobranchus reticulatus | Plocamopherus maderae |
Scyllaea pelagica | Spurilla neapolitana | Stiliger llerae |
Stilochelus striatus | Tayuva lilacina | Trapania bajamarensis |
Trinchesia ocelata | Tylodina perversa | Umbraculum umbraculum |
Como ya he mencionado, además de los nudibranquios, en Canarias pueden encontrarse otras babosas marinas dentro del grupo de los heterobranquios, como los aplysiidos, los sacoglossos, los umbracúlidos o los cefalaspídeos, estos últimos considerados los más "primitivos", con especies muy curiosas como la Notodiaphana atlantica, la primera y única especie de este género en el Atlántico, según concluye un grupo de investigación hispano-cubano, y de la que solo se conoce otra del mismo género en el Indo-Pacífico. Toda esta variedad refuerza la riqueza natural del archipiélago y ofrece a biólogos, buceadores y fotógrafos la posibilidad de documentar una fauna marina singular y diversa.
Dentro del grupo de los umbracúlidos (orden Umbraculida), la especie Umbraculum umbraculum es una de las más grandes, pudiendo alcanzar los 20 cm de longitud. La mayoría de estas babosas marinas habitan en aguas templadas como es el caso de Canarias, donde es relativamente fácil de ver.
El sacogloso Stiliger llerae es una de las babosas marinas más llamativas que podemos encontrar en los charcos intermareales de Canarias. Este pequeño heterobranquio de menos de medio centímetro de longitud se encuentra solamente en el alga Codium adhaerens, donde se alimenta y reproduce.
Impacto humano sobre la biodiversidad marina
La degradación de los hábitats marinos, provocada por la contaminación, el turismo de masas o la construcción descontrolada del litoral, representa una amenaza creciente para la biodiversidad, incluidas las especies de heterobranquios. Estos moluscos dependen de ecosistemas saludables para alimentarse y reproducirse, como fondos rocosos, praderas submarinas y charcos intermareales. La alteración de estos hábitats sin duda reduce la disponibilidad de alimento y sustratos adecuados, poniendo en riesgo su supervivencia.
En las islas Canarias, los charcos intermareales juegan un papel fundamental en el ciclo de vida de los heterobranquios. Estas áreas, formadas durante la marea baja, actúan como refugios temporales donde los moluscos pueden alimentarse y reproducirse sin la presión de las olas. La biodiversidad presente en estos charcos proporciona una fuente rica de alimento para los heterobranquios, lo que resalta su relevancia para la conservación de estas especies. Así, la protección de estos hábitats, aunque pequeños en tamaño, es esencial para mantener la biodiversidad marina del archipiélago.
Para mitigar la degradación de los hábitats marinos, es vital implementar medidas de conservación, como la creación de áreas marinas protegidas y la promoción de prácticas sostenibles de pesca y turismo. Estas acciones no solo beneficiarán a los heterobranquios, sino que también contribuirán al equilibrio ecológico general, garantizando la salud de los ecosistemas marinos del archipiélago y la preservación de su biodiversidad.
Nudibranquio de la especie Favorinus vitreus fotografiado en un charco intermareal de la isla de Gran Canaria.
El estudio y la documentación de los heterobranquios en Canarias contribuye a la comprensión de la biodiversidad marina de Canarias. La fotografía submarina no solo permite registrar estas especies, sino que también ayuda a la divulgación científica y a la concienciación sobre la importancia de la conservación de los ecosistemas marinos. Preservar estos ecosistemas es fundamental para mantener el equilibrio ecológico y garantizar la presencia de estas especies en el futuro, algo absolutamente compatible con el respeto por la vida marina y la práctica de un buceo responsable.
A continuación, se presenta una selección de fotografías propias de heterobranquios en Canarias. Las imágenes están acompañadas de descripciones breves que incluyen información sobre la especie, detalles de su morfología y el entorno en el que fueron fotografiadas.